jueves, 29 de diciembre de 2016

2000 PIEZAS ROTAS

La vi reír,
mientras el profesor
explicaba la importancia de los cosenos.
La vi llorar ,
observando un cuadro de Goya.
La vi cantar,
para espantar a la tristeza.
Y convertir,
su día más gris
en un arcoíris.

Me dijo,
mientras señalaba un puzle de la pared,
“mi corazón,
 está compuesto por más piezas,
pero estas,
no encajan”
Y el mío se rompió
para hacer encajar sus piezas con las mías.

Me enseñó a llegar a las estrellas
con tan solo cerrar los ojos.

E inventó una teoría
con fantasmas y dinosaurios
para explicar nuestro amor,
y la verdad,
me la creí.

Tenía tanta magia en las pestañas
que cada vez que las movía
a mi me parecía ver
como si un cohete despegara.

La creían loca
y era la única cuerda
de toda la ciudad.

Caminaba descalza
para sentir la tierra,
se bañaba desnuda en el mar
para que el agua le envolviera,
le gustaba jugar con fuego
y amaba cuando el viento
mecía su colorida cabellera.
En resumen,
era la dueña de mis elementos.

Estaba harta de caer,
no comprendía
el porqué de tantas piedras,
pero muchas de las veces
se levantaba sin apenas rozar el suelo.

Y yo la dejé marchar.

Vi que los trozos que dejó mi corazón roto,
eran mucho más pequeños que los suyos,
que no encajaban.

Le di alas
y le dije
que se lanzara a volar.

Ella me las devolvió
y me contestó que prefería
quedarse en el suelo conmigo.

Y mi minúsculo corazón
creció
hasta encajar a la perfección
con el suyo.

Porque nuestras 2000 piezas rotas,
juntas
forman
el
puzle
más
bonito
del

mundo.

martes, 27 de diciembre de 2016

ASESICIDIO

No fue un asesinato.

Mi mano sujetaba el gatillo,
aunque la encargada
de acompañar la pistola
hasta mi sien,
fue la suya.


No fue un suicidio.

Su voz,
alentaba a mis oídos
a que hiciera lo correcto
y vaciara el cargador.


No fue doloroso.

Porque hasta en mi último aliento,
sentí su mano acariciando mi pelo.
Y el sabor de sus labios sobre mi piel,
Anunciando que el tiempo llegaba a su fin.

No tengo ni puta idea de que fue.

Solo se,
que fue un final pactado
en el que las dos buscábamos lo mismo
yo olvidarme de ella
ella, deshacerse de mi.

Fue un asesicidio.
Porque la única forma
de definir lo ahí sucedido
implica

inventar nuevos términos.

viernes, 23 de diciembre de 2016

ALMA DE AVE FÉNIX

Era inevitable,
en algún momento debía de suceder,
y hoy,
ha sido el día.

Hoy me he enfrentado al espejo,
y mis ojos,
no se han vidriado.
 Ni me he horrorizado
a ver lo que en el se reflejaba.

He recorrido el mapa que forman mis estrías,
y me he dado cuenta de que al unirlas
surge la palabra “quiérete”.

Hoy, no maldigo a los kilos de más
ni a las dioptrías de menos.

Mis cejas desarregladas
han pasado a segundo plano,
porque al observar mi rostro,
me he parado a observar el color del iris
que lucen mis ojos,
y sé que suena osado
hablar así de una misma,
pero es un azul verdoso
digno de contemplar.

Hoy los complejos
se han disipado,
como la polución
después de la lluvia,
el mundo ha perdido su tono grisáceo
y ante mí
ha aparecido un nuevo mundo de tonalidades.

Hoy he roto con los “no puedes”
“no debes”
“no lo intentes”.

He aceptado a un pensamiento que hace meses
que me ronda por la cabeza
dice así:
HAZ LO QUE TE DE LA REAL GANA.

Fui hoguera que hicieron arder,
niña, a la que vapulearon
hasta convertir en simple ceniza,
capaz de desaparecer
con el mínimo de los suspiros.

Pero tengo alma de Ave Fénix
y he decidido volver,
para decirles,
a todos aquellos que quieren reír sobre mi tumba,
que no tengan prisa,
ya que yo misma me voy a encargar,

de que lloren durante mi vida.

jueves, 22 de diciembre de 2016

UTOPÍA



Mi lengua explora tu boca
y nuestras pupilas se dilatan
al ritmo
en el que tus manos,
se abren paso entre mis caderas.

La falda,
con la que llegaste a mi vida,
acompaña a mi armadura,
en la papelera.

Cuatro paredes nos envuelven
y yo,
me dedico a leer en Braille
cada lunar de tu espalda.

A tasar tu cuerpo,
digno de la más bella
escultura renacentista.

Sucesión de madrugadas
cuyo último fin es dormir.

Y mi casa
deja de serlo,
se convierte en nuestro hogar,
porque al traspasar la puerta
me invade tu olor
y no puedo evitar esbozar una sonrisa
e ir corriendo
a descubrir nuevos términos
para definir la palabra amor.

Y es una utopía,
tu piel rozando la mía.
Que has hecho de mi casa hogar
y has conseguido lograr
cambiar cada segundo
de mi estrambótico mundo
que rápidamente

hiciste tuyo.

domingo, 11 de diciembre de 2016

503

Sabina se equivocaba,
ya llevo más  de quinientas noches
intentando olvidarla.

Pero vuelve,
en cada risa,
suspiro,
desaliento,
poema,
canción.

Las musas me abandonan
cada vez que les planteo
el reto de definirla.
Quizá no hayan sido inventadas palabras
capaces de resumir tanta belleza.

Era una zorra,
entró en mi vida cual huracán
y a mí, que soy tormenta
me redujo a llovizna.

Ya van quinientas tres noches,
y pienso que son pocas.
¿Cómo olvidar las horas entre sus caderas,
los suspiros que arrancó de mis labios,
el único “te quiero” que ha sido capaz de pronunciar mi corazón?

¿Que hago con las horas
que me sobran?
Esas que ya no puedo dedicarle,

¿Dónde quedaron los fuegos artificiales
entre las sabanas?

Y vivo de recuerdos
y a veces resulta doloroso
pero con su huida
se llevó también
mis ganas de seguir.

Apunta quinientas tres
porque esta es la ultima noche
que paso pensando

en ella..

martes, 6 de diciembre de 2016

QUIERO

No quiero vivir de recuerdos.
Quiero vivirte a ti,
en presente
durante el reto de la eternidad.

Quiero ser tu amor correspondido,
a la que busques en otros cuerpos,
el primer pensamiento de tus mañanas,
que te gires al despertar
y observándome
vuelvas a caer en los brazos de Morfeo.

No quiero un pasado en común.

Quiero un futuro sin planificar,
que seas mía
pero libre.
No te pido un para siempre,
pero te reto a cumplirlo.

No quiero una noche de fuegos artificiales.

Quiero pasar las madrugadas contando los besos
que caben en tu cuerpo,
poder disfrutar de cada segundo
que pase tu mano
dibujando en mi espalda
eternos infinitos.

Quiero calmar tormentas
en tu boca
y provocar huracanes
en tu cuerpo.

No quiero formar parte de tu mundo.

Quiero ser osada
y creer que algún día
seré dueña de tu universo,
como tú lo eres del mío.

Quiero invocar tus instintos más primarios
cada tarde.
Pasar siglos entre las sábanas
hasta caer exhaustas de nosotras
y ausentes del resto.

Quiero vivir en la cúspide
de tus caderas.
Perderme en el bosque
de tus pestañas.
Y moriré con gusto
siempre que sea observando tus ojos color café.

No quiero hacer poesía contigo.

Quiero inventar nuevos modos

de definir la palabra Amor.



viernes, 2 de diciembre de 2016

Ya nadie escribe

Nadie escribe a los cobardes,
y si lo hacen,
es para reírse de ellos.

Nadie escribe a los que no son capaces
de dormir con la luz apagada
y se abrazan a si mismos para no sentirse solos.

Nadie escribe a la pereza,
ni a esas ganas de seguir durmiendo
que se apoderan de nosotras cada mañana.

Nadie escribe al poeta.
Nadie te escribe a ti.
Nadie me escribe a mi.

Ya nadie escribe.